En la actualidad muchas personas vivimos con constante estrés, incluso lo vemos como algo normal de nuestro día a día. Lo que la mayoría no sabe es que nuestros perros también pueden pasar por este tipo de situaciones estresantes y que incluso el estrés puede llevarlos a tener problemas con la alimentación.
Pero ¿Por qué un perro podría tener estrés?
Debemos tener en cuenta que los perros actualmente llevan un estilo de vida muy diferente al que su naturaleza (carnívoros descendientes lobos) manda, el hecho de vivir en ciudad, o de convivir con personas que muchas veces andan estresadas a diario, les provoca un estrés que puede afectar su salud. Algunas formas de darnos cuenta que tenemos un perro con estrés es que veamos problemas de conducta, miedos, reactividad, etc. Algunos perros no saben manejar sus emociones positivas tampoco, es decir se emocionan mucho y esto también puede crear problemas de estrés.
Cuando tenemos problemas de estrés podemos tener desajustes en la microbiota intestinal dando lugar a infecciones, sistema inmune débil, más probabilidad de enfermar etc. También permeabilidad intestinal, que es traducida en problemas de alergias o intolerancias, diarreas, vómitos etc.
¿Podemos ayudar en algo con la alimentación?
La buena noticia es que si, si conseguimos tener un intestino saludable, va a dar lugar a una mejora a nivel emocional. Lo primero que tenemos que hacer es evitar dar cualquier alimento que no forme parte de la dieta de un carnívoro. En este grupo encontramos a los cereales y legumbres. El gluten de los cereales y otras proteína vegetales similares no son bien digeridas por nuestros perros.
Lo que debemos hacer es dar una dieta completa fisiológicamente apropiada a su condición de carnívoro facultativo. Te recomiendo trabajar mas que todo con una dieta cruda BARF debido a que así aportaremos enzimas naturales de la propia carne cruda, que nos ayudará a en las digestiones. También tendremos mayor aporte de aminoácidos esenciales como el triptófano para producir neurotransmisores como la serotonina. Adicional los huesos, que son muy importantes para la masticación del perro, para reducir el estrés y generar tranquilidad y felicidad en ellos.
Si tu perro no come barf pero si comida natural cocida, puedes agregar huesos recreativos para roer o algún mordedor natural. En perros muy ansiosos se pueden usar juguetes interactivos como los kongs, para darles de comer
Siempre recuerda que si tu perro tiene problemas de comportamiento consultar con un experto.
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